Y mientras el barco "Que ni Dios hundiría"" zozobraba en las aguas del Altántico, el sacerdote impartía la confesión y la absolución a la mayor cantidad de personas que fuera posible.
Padre Thomas Roussel Davids Byles
(1870-1912)
El mayor de siete hermanos, hijo de un ministro protestante, se convierte al Catolicismo mientras estudiaba Teología en la Universidad de Oxford.
Es ordenado como Sacerdote en Roma a los 32 años de edad, donde es enviado a la parroquia de Ongar en Essex, Inglaterra
Viaja a Nueva York a bordo del Titanic, como pasajero de Segunda Clase, para oficiar la boda de uno de sus hermanos, William Byles, quien anteriormente se había mudado a Estados Unidos por causa de negocios.
En la mañana del Domingo 14 de Abril de 1912 el Padre Byles ofrecío la Santa Misa para los pasajeros de 2da Clase y después para los pasajeros de 3ra Clase en sus respectivas salas sociales.
Según unos testigos, el Padre Byles estaba paseando por la cubierta con el Breviario Romano en el momento del impacto con el Iceberg.
Después del choque, el Padre Byles actuó valientemente ayudando y guiando a los pasajeros de Tercera Clase hacia la parte superior del barco y también a que fueran subidos en los botes salvavidas, y cuando estos se acabaron, escucho más de un ciento de confesiones impartiendo la absolución.
Por su condición de Sacerdote, los fieles católicos le ofrecieron espacio en los botes salvavidas, pero el rechazo todas las ofertas para que ese lugar fuera ocupado por alguien mas. Permaneciendo y consolando a su rebaño hasta el final. rezando el Rosario y otras oraciones
El cuerpo del Padre Byles, jamás fue recuperado.
Los testimonios acerca del Padre Byles narrados por los sobrevivientes, han sido llevados a la pantalla grande, tanto en la película de 1979 como en la de 1997.
2 comentarios:
Que encomiable! ese si cumplió con su misión hasta el final!
este si tiene ser beatificado!
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